¿Dónde se esconde la Miss del Mar? Caladeros y festivales submarinos

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¿Dónde se esconde la Miss del Mar? Caladeros y festivales submarinos

Cuando estás en un barco, es difícil imaginar todo lo que hay debajo. Si te adentras, llegará un momento que solo veas agua y cielo. No escucharás más que el romper de las olas contra el casco. Respirarás hondo y te dejarás impregar por la fresca brisa de bruma salada. Lo de abajo es otro mundo: el fondo del mar. Un espacio inmenso con tendencia a lo diáfano y zonas que, gracias a sus favorables condiciones, se convierten en las favoritas de las más deliciosas criaturas. Son como festivales submarinos que consiguen atraer grandes cantidades de pescados y mariscos de alto valor gastronómico. Se conocen como Caladeros, porque los pescadores tienden a calar allí sus redes.

Hace poco, tuvimos una interesante charla con Iñaki, un patrón moderno especializado en la pesca de Quisquilla de Motril salvaje – también llamada ‘de arrastre’, por la forma en la que se captura, deslizando la red por el fondo y «arrastrando» en su interior una azarosa y variada selección de manjares marinos. La Miss del Mar tiene sus escondites predilectos e Iñaki los ha registrado en los mapas de su exclusivo sistema de geolocalización. Gracias a él, cuando se embarca, puede ir directo al grano, sin titubeos ni contemplaciones. Lo tiene todo controlado y calará en un lugar o en otro, dependiendo del producto que desee capturar. Conoce esos lugares y sabe perfectamente lo que encontrará en cada uno de ellos. Según nos contó, si generalizamos un poco, podemos señalar tres puntos neurálgicos. Son las zonas clave que copan el mapa 3D de las pantallas que convierten en «croquis» legibles la infinidad de datos y coordenadas que el patrón registra. Si no has leído su post, deberías hacerlo. Ha equipado sus barcos con la tecnología más sofisticada y cuenta con un complejo sistema de geolocalización que lleva años alimentando con datos que son oro.  Cada caladero tiene una idiosincrasia particular que impacta, de una u otra forma, en la cantidad de capturas y el grado cualitativo de las mismas.

  • ZONA A: Son las localizaciones más cercanas a Motril, donde se encuentran unas quisquillas sabrosísimas de tamaño mediano. Digamos que el área en cuestión dibujaría un trazo imaginario entre Cerro Gordo y La Rábita. Un terreno con mucha hondura y acantilado, donde no se cría tanto pescado, por las limitaciones que suponen sus fondos. «Sin embargo, todo lo que se captura allí, tiene una calidad muy superior a lo que puedas encontrar en otros puertos», apunta Iñaki. Algo fácil de entender si se sabe que el de Motril es el único que bebe de las aguas de Sierra Nevada. Y eso se nota en el color pero, sobre todo, en el sabor, mucho más dulce y elegante. El caladero más próximo a Motril para coger Quisquilla de arrastre está exactamente a 2.58 millas. Seis kilómetros que – Iñaki y los suyos – tardan poco más de media hora en recorrer.
  • ZONA B  – El Seco: Es una isla sumergida, más inaccesible por su distancia y porque, cuando hace mal tiempo, es prácticamente imposible llegar. Allí, las Quisquillas son totalmente salvajes. Disponen de más tiempo para alimentarse y completar sus procesos digestivos en absoluto relax. Son más grandes y carnosas que las de zonas más cercanas al puerto, situado a treinta y tres millas de allí. El barco va a veintipocos kilómetros por hora – que, en el argot marengo, serían unos 10 nudos-. Para calar allí, los marineros motrileños necesitan casi tres horas.
  • ZONA C: La famosa Isla de Alborán es el destino más alejado, donde se dan circunstacias similares a las de El Seco. La particularidad es un tipo de coral que gusta mucho a las Quisquillas de esa zona y acelera su maduración. Recién pescadas son transparentes, como todas. Al principio, tornan de rosadas a rojizas, para acabar adoptando – antes que las demás – un tono negrusco que afecta a su aspecto y sabor. Hay quien soluciona este handicap con un químico granulado que, Iñaki asegura: «baja la calidad del marisco».

El mar – o la mar, como dicen quienes la trabajan – es una uniforme inmensidad cargada de secretos y apasionantes historias. Si te ha gustado y lo dices, nos estarás motivando muchísimo y si compartes o recomiendas nuestros contenidos, prometemos recompensarte con más y mejor. ¡Buen día!

 

 

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